Pese a las críticas que recibió el proyecto de reforma tributaria por parte de varios gobernadores, entre ellos Alfredo Cornejo por el impuesto al vino, el jefe de Gabinete Marcos Peña intentó poner paños fríos a la discusión por el impacto que tendrán en las economías regionales los cambios tributarios que impulsa el Gobierno.

En este sentido Peña opinó que la respuesta que recibió el gobierno nacional de parte de los gobernadores sobre la reforma tributaria “ha sido muy positiva”.

En una conferencia de prensa realizada en el CCK tras una reunión de gabinete ampliado, el funcionario macrista además precisó que la “discusión se acota a impuestos específicos”, pero aclaró que “de ninguna manera refleja una complicación en términos de romper el clima de diálogo o consenso” entre las partes, para avanzar. 

Además recordó que en una semana los recibirán en la Quinta de Olivos para dialogar sobre el proyecto, que todavía no fue enviado al Congreso. “Todas las economías regionales se ven beneficiadas”, aseguró Peña, en una conferencia de prensa junto al ministro de Hacienda Nicolás Dujovne. También Y explicó que las críticas de los gobernadores se acotan a “una partecita del proyecto”, en referencia a “impuestos específicos” como al vino que tendrán impacto en las economías provinciales.

De todas maneras hizo un fuerte respaldo de la iniciativa. “Es una extraordinaria herramienta para lograr sistema tributario más justo, con énfasis en la creación de trabajo y en el avance hacia cargas impositivas más equitativas y progresivas”, dijo el coordinador de ministros.

“Vamos a generar instancias de diálogo, discutir los números sobre la mesa y escuchar los argumentos. No estamos imponiendo nada”, aclaró en conferencia de prensa, tras la reunión de Gabinete ampliado acompañado por Dujovne, encargado de la iniciativa.