El nuevo conflicto salarial con los empleados estatales va camino de empeorar por la decisión oficial de excluir al sector de la salud del aumento que se entregará en el 2007. La postura fue anunciada ayer por el ministro de Gobierno, Sergio Marinelli. “Con la salud no hablamos de acuerdos salariales, porque el convenio de este año involucra al 2007 también. Ellos van a recibir un importante aumento a partir de enero”, explicó el funcionario.

    Pero esto, desde ya, cuenta con el rechazo del ala más combativa de la salud, que este año mantuvo paralizados los hospitales de la provincia durante 40 días en reclamo de aumentos y pactos incumplidos. La secretaria gremial de ATE, Raquel Blas, afirmó ayer que no corresponde excluir a la salud de la suba del 2007 porque el acuerdo del 2006 está cuestionado en la Justicia, justamente por este gremio (ver aparte). Además, Blas aseguró que sacar a la salud de la nueva conversación salarial representa “una cachetada para el bolsillo de los trabajadores”, ya que el convenio de este año no va a alcanzar para cubrir “ni siquiera la mitad del costo de la canasta familiar, que es el nivel desde el que debe arrancar el salario”.

DIÁLOGO. La exclusión de la salud del aumento 2007 se conoció justo cuando el Gobierno ha comenzado a dialogar con los gremios sobre este incremento con la misión de evitar las medidas de fuerza de los estatales, que arrancarían el viernes. El jefe de la cartera política empezó el lunes con una ronda de consultas y eligió para ello el gremio más conciliador: ATSA. Para hoy, Marinelli tiene prevista una reunión con los dirigentes del SUTE, mientras que el jueves a las 10 se reuniría con Vicente Frezza, el dirigente que conduce ATE.

    El ministro de Gobierno calificó los encuentros como “reuniones de trabajo para establecer el diálogo, porque sin diálogo, no hay acuerdo”. Si bien el propio gobernador Julio Cobos sugirió que el aumento a los estatales rondaría 13%, Marinelli insistió en que el Ejecutivo “no tiene una posición rígida de antemano” y volvió a deslizar la posibilidad de mejorar la oferta. Incluso, el funcionario sostuvo que la mejora salarial “podría ser superadora a la media que dará la Nación”. Kirchner también está negociando un incremento cercano a 13%. Marinelli remarcó que “aún no está cerrado el presupuesto 2007”, pero aclaró que el Gobierno no aceptará “pedidos de 30 o 40%”, que son las cifras que manejan los gremios.

PARITARIAS. De paso,Marinelli amenazó a los gremios con la posibilidad de patear el tablero si hay paros.“Tendrán que demostrar que las paritarias son el mecanismo efectivo para dilucidar estos temas”, indicó. Ante los anuncios de paros, el funcionario dijo que “el Gobierno quiere que el Estado preste sus servicios correctamente, es decir, que la gente trabaje”.