La tira Hermanos y detectives, que se emite por Telefé (en Mendoza, por la pantalla de Canal 9 Televida) está aproximándose a sus últimos capítulos. La fantástica apuesta de Damián Szifrón que tiene como protagonistas principales a Rodrigo de la Serna y a Rodrigo Noya ya estaría viviendo las últimas instancias de un ciclo en el que la acción, la comicidad y el drama consagraron a esta creación televisiva en un verdadero suceso, aprobado por la crítica especializada como un producto digno de admirar, no sólo por sus protagónicos, sino por la compacta y entretenida puesta en escena, capaz de cautivar a todo espectador.
ACERCA DE LA APUESTA. Con una ingeniosa trama y divertidos diálogos, se despide una propuesta que mezcló comedia y policial por partes iguales. Durante cada uno de sus capítulos, De la Serna no le perdió pisada a su personaje, manifestando toda la solvencia actoral que viene consolidando y que lo va situando como uno de los mejores actores de la escena local. En cuanto al niño Noya, aunque no desentonó ni perdió su magia, en una extraña combinación de inteligente inocencia, corrió el riesgo de ir construyéndose sobre una fórmula repetitiva que pudo transformarlo en un estereotipo de sí mismo.
