Los alumnos de la escuela 4-124 Reynaldo Merín de San Rafael fabrican en su taller, desde hace tiempo, sillas de ruedas para discapacitados. El año pasado, la escuela firmó un convenio con la OSEP y fabricó para sus afiliados cincuenta sillas. Las tareas las desarrollan chicos de los últimos años del polimodal, unos noventa, orientados por los profesores.
También realizan sillas para particulares y realizan reparaciones, principalmente, para personas carenciadas, a quienes no les cobran. En años anteriores, hicieron sillas automatizadas –con motor–, pero dejaron de construirlas por los altos costos. En setiembre del 2000, la escuela recibió un premio nacional en el marco del Proyecto Escuelas Solidarias, gracias a varias iniciativas que llevaron adelante.
Como novedad, este año se trabajará en la adaptación de motos de pequeñas cilindradas –Scooter– destinadas a discapacitados y que está permitido usar en la vía pública. Trisol se llama este trabajo de modificación y adaptación. Por otra parte, la escuela acaba de ser incluida en un proyecto a nivel nacional que incluye a cien instituciones, las que recibirán insumos para la fabricación de elementos ortopédicos. Entre estos se incluyen muletas, andadores, prótesis y sillas de ruedas.
Estos productos estarán destinados a personas con discapacidades motoras. Los materiales llegarán gracias a un convenio entre el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) y el Instituto Nacional de Educación Tecnológica (INET), que depende del Ministerio de Educación de la Nación.