El cuerpo sin vida de Félix Justo Salas, de 55 años, fue encontrado ayer por la mañana en la localidad de Chapanay, en San Martín. El cadáver fue hallado flotando boca abajo en la hijuela González, que se encuentra bordeando el carril Chimbas de esa localidad del departamento del Este, y se desconocía cuánto tiempo llevaba muerto y en ese lugar. El macabro hallazgo tuvo lugar a las 8.30 y se presume que Salas –quien tenía problemas psiquiátricos, aunque no pudo precisarse de qué tipo– murió ahogado, pese a que aún no estaban los resultados definitivos de la averiguación del deceso.

   Según fuentes policiales, la presunción de que habría fallecido ahogado se desprende del estado mental de Salas, la forma en que fue encontrado y el hecho de que no presentase signos de violencia o ataques brusco en el cuerpo. Salas –quien residía en el barrio San Cayetano de Junín– había sido visto por última vez el domingo, cuando se habría ausentado de su hogar, situación que alarmó a su entorno ya que nadie tenía datos sobre él y dónde se encontraba desde entonces.

   Incluso, su familia –preocupada– había efectuado una denuncia referida a la averiguación de paradero del hombre desde ese domingo, ni bien se percataron de la prolongada ausencia. Inmediatamente, los efectivos policiales comenzaron las tareas para encontrar al sujeto, las que se prolongaron durante el lunes y ayer y que consistieron en una intensa búsqueda de Salas, a quien lograron encontrar a primera hora de ayer.

  Tras descubrir el cuerpo y constatar de que se hallaba sin vida, lo trasladaron y se dio aviso a la familia del hombre. Tras ver el cadáver, lo reconocieron en seguida como el del desaparecido. /Ignacio de la Rosa