Las pericias realizadas al llavero encontrado permitirían determinar que este no fue dejado en el lugar por López, sino que habría sido arrojado en el jardín con posterioridad a la fecha de su desaparición. Los estudios realizados precisan que,“con relación al cuero del llavero, no presenta signos de haber estado expuesto al ataque de las inclemencias climáticas, calor, lluvia, humedad, lo que hubiera provocado en él la pérdida de flexibilidad y el deterioro generalizado, por lo que su exposición a las inclemencias climáticas es bastante inferior a los sesenta días”.
Por otro lado, el subsecretario de Derechos Humanos de la Nación, Rodolfo Mattarolo, estimó que la causa del caso Etchecolatz-Jorge Julio López, podría pasar a la Justicia federal si se confirma que se trata de una desaparición forzada.