BUENOS AIRES (TÉLAM). Más de 80.000 deudores en moneda extranjera, quienes tienen su vivienda única hipotecada y con riesgo de remate a raíz del desequilibrio producido en el 2002 tras la devaluación del peso, podrán contar por ley con un mecanismo que les permitirá saldar sus obligaciones a un valor de 1,83 pesos por dólar.
Tras la aprobación la semana pasada en el Senado del proyecto que establece un sistema de conciliación primero y de recálculo de la deuda si persistiera la diferencia, la Cámara de Diputados se apresta ahora a sancionarlo el miércoles. El consenso alcanzado en la Cámara Alta –donde el proyecto fue votado por unanimidad el miércoles– preanuncia una plácida aprobación en el recinto de los Diputados, conscientes de que deben desactivar cuanto antes una bomba de tiempo.
La iniciativa pretende terminar con los juicios entre acreedores y deudores a raíz del desequilibrio monetario producido por la devaluación, que llevó a remate no pocas viviendas familiares por decisión de los jueces, pese a las normas de protección aprobadas por el Parlamento. El proyecto está limitado a deudores que no excedan los 100.000 pesos y que hubieran caído en mora entre el 1 de enero del 2001 y el 11 de setiembre del 2003 a raíz de la compra o ampliación de una vivienda única.