BUENOS AIRES (TÉLAM). A 27 años de la visita que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) realizó a Argentina en plena dictadura, el especialista Robert Goldman aseguró que la presencia en el país del organismo salvó la vida de numerosas personas que estaban detenidas. El experto norteamericano mencionó entre los sobrevivientes al canciller Jorge Taiana, quien fue visto por los comisionados en poder de la dictadura militar y esa observación se convirtió “en una garantía” para que luego fuera liberado.
En una entrevista con Télam, Goldman opinó que Argentina “es un país que ha hecho una lectura del pasado”, por lo que sostuvo que en materia de derechos humanos “es uno de los grandes éxitos en el hemisferio”. El especialista fue condecorado por Argentina con la orden del Libertador San Martín en el grado de comendador por su trayectoria en la protección de los derechos humanos. Goldman dijo que “durante la visita de la CIDH, hubo casi seis mil personas que marcharon para denunciar los casos de violaciones, en momentos en que en Argentina desaparecía gente”. “Esto produjo un impacto sobre los comisionados, que fue un grupo muy bueno, en especial, Andrés Aguilar, el titular de la CIDH, quien había sido fiscal general en Venezuela y exiliado político”, señaló Goldman.
“El informe que elaboró fue de primera –agregó– y yo verifiqué, revisando la historia de la comisión, que jamás hubo una visita in situ, antes o después, donde tanta gente en un período de emergencia, con un gobierno de facto nefasto, se atreviera a desafiar el régimen y hasta concurrir con riesgo personal a denunciar al Estado”. “Y la comisión cumplió al preparar un informe de primera, que cuando se presentó fue utilizado no sólo por la administración norteamericana de James Carter, sino también en Europa para endurecer la posición frente al gobierno argentino”.
¿El informe sobre el caso argentino tuvo alguna influencia fuera del país? Sí, sí. Porque se difundió por todas partes. Los demás vieron que la CIDH fue al país y produjo un informe durísimo, durísimo. El texto también dijo: ‘Exigimos que no haya represalias contra nadie que haya venido a vernos’. Esto le agregó protección. Yo creo que también salvó vidas. Gente, por ejemplo, como el canciller Jorge Taiana, quien estaba preso por entonces. Los miembros de la comisión fueron a verlo y eso fue una garantía.
La comisión pudo ir a lugares, tomar el nombre de las personas. Por eso fue muy difícil después que esas personas desaparecieran. La comisión utilizó ese margen que existió. La CIDH produjo informes sobre Uruguay y Paraguay, pero no pudieron ingresar allí. Aprobaron informes duros, pero no tuvieron el impacto que tuvo como el que hizo sobre Argentina. La CIDH pasó casi dos semanas recorriendo el país.