Un total de 57 personas murieron y 128 resultaron heridas, al colisionar ayer dos trenes de pasajeros en el delta del Nilo, al norte de El Cairo, según el ministro de Sanidad egipcio, Hatem al Gabali. Los heridos, varios de ellos graves, han sido trasladados a seis hospitales de la zona donde ocurrió el accidente, uno de los peores registrados en Egipto desde el 2002, dijo Al Gabali, informó la agencia egipcia de noticias MENA. Fuentes policiales y médicas habían cifrado en, al menos, 80 el número de víctimas mortales.

    El accidente se produjo hacia las 7.15 hora local de ayer entre un tren procedente de la ciudad norteña de Banha y otro que esperaba en la estación de Qaliub, a unos 20 kilómetros al norte de la capital egipcia. Alrededor de 50 ambulancias trasladaron a las víctimas a los hospitales de Qaliubiya y a la vecina Shebin al Qanater, mientras que en las labores de rescate participaron efectivos del Ejército, junto con miembros de la Defensa Civil y equipos médicos.

   El gobernador de Qaliubiya, Adli Husein, quien se desplazó junto a otras autoridades egipcias al lugar del accidente, explicó que este ocurrió cuando el tren número 808, que circulaba a alta velocidad, chocó con la parte trasera de otro en la estación de Qaliub. Fuentes del Ministerio de Transporte dijeron que varios vagones descarrilaron y volcaron, y que los bomberos han conseguido controlar un incendio en el tren que procedía de Banha. La mayor tragedia ferroviaria en la historia de Egipto ocurrió en febrero del 2002, al incendiarse un tren que cubría el trayecto entre El Cairo y Luxor abarrotado de pasajeros, en el que murieron 376 personas.