Corea del Norte lanzó ayer un nuevo misil, que cayó en el mar de Japón y se sumó a los seis disparados el lunes en la misma zona, informaron fuentes gubernamentales citadas por la agencia de noticias Kyodo. PRUEBA. El nuevo lanzamiento se produjo a las 17.22 (5.22 de la Argentina), casi catorce después de que Corea del Norte hiciera su primera prueba. Según el canal de televisión nipona NTV, que citó a fuentes del Ministerio de Exterior japonés, el séptimo misil parece ser un Scud de corto alcance.
En declaraciones a la prensa tras conocerse el lanzamiento del séptimo misil, el primer ministro japonés, Junichiro Koizumi, mostró la necesidad de recurrir al diálogo para resolver el problema norcoreano, pero subrayó también la “firmeza” del Gobierno japonés para hacer frente a tales “provocaciones”.
LA ONU.
El Consejo de Seguridad estudiaba ayer cómo responder al lanzamiento de misiles por parte de Corea del Norte. Entre las posibilidades, está una resolución elaborada por Japón que contempla imponer sanciones al aislado país asiático.
Los 15 miembros del Consejo de Seguridad se reunieron hoy, con carácter urgente, para tratar la crisis provocada por los misiles de Corea del Norte, y todo ellos coincidieron en la necesidad de reaccionar de forma “rápida y contundente” para frenar las acciones de Pyongyang, la capital norcoreana. Japón, apoyado por EEUU y Reino Unido, prevé distribuir hoy mismo un borrador de una resolución, en la que se pide a los estados miembros suspender la transferencia de recursos financieros y materiales tecnológicos que puedan ser usados por Corea del Norte para el desarrollo de misiles o armas de destrucción masiva.
El embajador japonés, Kenzo Oshima, resaltó que es el momento de una resolución, por la “gravedad” de la actuación de Corea del Norte, que lanzó varios misiles en el mar de Japón, en contra de la moratoria de pruebas de 1999. Corea del Norte provocó una crisis similar en 1998, cuando lanzó una versión del misil Taepodong en el océano Pacífico, pero China se opuso a cualquier medida firme por parte del Consejo, y la cuestión se zanjó con una declaración a la prensa. Oshima recordó que después del lanzamiento de 1998 Pyongyang anunció su intención de retirarse del Tratado de No Proliferación de armas nucleares (TNP) y luego dio a conocer sus ambiciones de desarrollar armamento nuclear.
“La posible combinación de armas nucleares con las pruebas de misiles realmente hace que la cuestión tenga que abordarse a un nivel diferente que en 1998”, dijo el embajador japonés. A nivel bilateral, Tokio anunció hoy una serie de medidas, como la prohibición de la entrada de barcos norcoreanos en puertos japoneses y el impedimento de viajar a Japón a funcionarios de Corea del Norte. “Si el Consejo decidirá otras medidas relacionadas, es algo que no puedo decir”, dijo Oshima, quien resaltó que cualquier respuesta de este órgano debe contemplar una condena clara al lanzamiento de misiles.