El presidente de EEUU, George W. Bush, dijo ayer que Irán debe de ser aislado económicamente si sigue adelante con su programa de enriquecimiento de uranio, y desafía, de ese modo, la presión internacional para que abandone el proyecto. “Es muy importante que el mundo se una para decir a los iraníes que, si deciden continuar con el programa, serán aislados”, dijo Bush en declaraciones a la prensa, al finalizar su reunión con el primer ministro israelí, Ehud Olmert.

    “Una de las fuentes de ese aislamiento sería la económica”, dijo el inquilino de la Casa Blanca, quien insistió en que Irán debe de sufrir consecuencias por su intransigencia. Bush se refirió a Irán como una “amenaza para la paz mundial” e insistió en que Teherán debe de abandonar sus ambiciones nucleares. Olmert también expresó su preocupación por los planes de Teherán. Los comentarios de Bush llegan en momentos en los que algunos críticos piden a Washington que abra un diálogo con Irán para calmar la situación en el vecino Irak. Pero,para que ello ocurra, tanto Olmert como Bush coincidieron en que, primero, Teherán debe abandonar sus planes de enriquecimiento de uranio.

CAMBIO DE RUMBO. El presidente de EEUU, George W. Bush, también analizó ayer el conflicto iraquí con el llamado Grupo de Estudio sobre Irak, un panel bipartidista e independiente encargado de buscar alternativas viables para poner fin a la guerra en ese país. Lo hizo en un encuentro privado en el Despacho Oval, centrado, sobre todo, en el intercambio de puntos de vista y en el análisis de la situación sobre el terreno, más que en la presentación de alternativas o propuestas concretas.

    El presidente ha querido reunirse con los integrantes de este grupo para intentar saber la dirección por la que podría ir el informe final de recomendaciones que están preparando y que, previsiblemente, saldrá a la luz antes de fin de este año. Bush aseguró, sin embargo, que de momento no conoce el contenido del informe. “No estoy seguro de lo que va a decir. Estoy deseando verlo” y “no voy a prejuzgarlo”, afirmó el presidente. A la espera de que los expertos que integran ese panel divulguen sus propuestas, Bush se declaró “impresionado” por las preguntas que le formularon y subrayó que el objetivo en Irak pasa por lograr que el Gobierno de ese país “pueda mantenerse, gobernar y defenderse”, aseguró que el primer mandatario de EEUU.