Ingresar al edificio de Salud Laboral es como entrar a una “casa embrujada”, hay de todo menos orden, limpieza y, sobre todo, condiciones dignas de trabajo. Cansados de ese ambiente los empleados reclaman medidas urgentes. Desde el Gobierno admiten estar al tanto de la situación: “Hoy la gente que tenemos está reparando escuelas”, dijo a El Sol Sergio Márquez, director de Recursos Humanos de la Dirección General de Escuelas, dependencia a la que pertenece la entidad.

De 9 a 17 la repartición permanece abierta. Cerca de 150 empleados conviven con esa realidad, algunos son más beneficiados que otros, por ejemplo, los que trabajan en el área de Salud Laboral, el resto, los que están ubicados en el 1er y 2do piso, destinado a Salario familiar y Liquidaciones primarias y secundarias, padecen a diario su ambiente laboral.

Así lucen las paredes donde funciona el área de Salario familiar

“Nos hemos cansado de reclamar, de presentar notas a Daniel Zárate, titular de Servicios Generales (donde se deben hacer los reclamos) y la respuesta siempre ha sido la misma: “no hay presupuesto”, aseguró un grupo de empleados mientras recorría las instalaciones.

Nudo de cables, una constantes en las oficinas

La paradoja de trabajar en Salud Laboral y no tener condiciones dignas

El edificio funciona en San Juan 490 de Ciudad hace diez años. Allí trabajan más de 150 empleados que, a diario, atienden a docentes y no docentes. Posee tres pisos, en la planta baja funciona Salud Mental, en el 1er piso está el área Administrativa y, en el segundo (el peor de todos) funciona Salarios familiares y Liquidaciones primarias y secundarias.

La planta baja, donde funciona Salud Laboral, es la única que está en condiciones

“Es muy triste llegar a trabajar y ni siquiera contar con un asiento o escritorio limpio. Agradecemos que, al menos, las tazas donde desayunamos están limpias, el resto es penoso y, nada tiene que ver el personal de limpieza ya que demasiado hacen”, expresó a este medio una de las empleadas.

 

La mujer también refirió que el personal de limpieza tiene que comprarse sus propios insumos porque no hay plata del Estado para guantes, lavandina, detergente o demás. “Nosotros les proveemos porque sino nos comen las ratas. Los baños no tienen agua y, cuando hay agua, están tapados. Están fuera del edificio y lo compartimos con el público, de modo que eso marca el estado de abandono para con nosotros”, aseguró.

Si uno recorre las oficinas comprueba que las palabras tienen argumentos. Los empleados trabajan con cables colgando sobre sus cabezas, archivos tirados en el piso por falta de espacio, mucha mugre y paredes destruidas (por la humedad y falta de pintura).

Pero eso no es todo sino que el único ascensor que posee la entidad no funciona, según los empleados. Ante el reclamo, Márquez dijo: “Se reparó y no es que no funcione sino que no le han dado el uso correcto, lo cual ha llevado a que el mismo no se detenga en el primer piso, pero está funcionando”. 

 
 

El Gobierno reconoce la situación pero no cuenta con personal

Frente a los reclamos, Sergio Márquez, director de Recursos Humanos de la DGE aseguró que están al tanto de la situación pero que el personal que cuentan para reparar las instalaciones de Salud Laboral está abocado en el arreglo de escuelas.

“Servicios Génerales es el área responsable de realizar el trabajo de mantenimiento y limpieza. Ellos cuentan con personal propio y, los pocos empleados que tienen, están abocados hoy al trabajo de las escuelas”, dijo Márquez.

El funcionario aseguró que dentro de las necesidades planteadas han intentado solucionar los problemas pero no alcanza el personal y tampoco hay modo de contratar más gente ya que no hay presupuesto.

“Hemos pintado el área de atención de Salud Laboral (donde se atiende la mayor cantidad de gente) las instalaciones están acondicionadas y sabemos que nos queda mucho por hacer, sobre todo, en la primera y segunda planta, pero hoy no contamos con personal”, expresó Márquez.

Finalmente el funcionario se comprometió en trabajar lo antes posible aclarando que no hay personal y tampoco plata para contratarlo.