La jura de los nuevos diputados arrancó con un hecho inédito e insólito: mientras el kirchnerismo se negaba a bajar al recinto, la oposición logró quórum propio y forzó el inicio de la sesión.

La peronista disidente Graciela Caamaño subió al lugar del presidente de la Cámara y convocó a la diputada del PRO Lidia Satragno (Pinky) para que encabezara la sesión.

Pinky la dio por inaugurada y recién entonces, y en un ambiente caldeado, los oficialistas entraron.Originalmente, la jura estaba prevista para las 17.

Pero la sesión recién tuvo quórum cerca de las 18 y sin la presencia de los diputados K.

El retraso se debió a las arduas negociaciones que mantenían kirchneristas y opositores sobre la distribución de poder en el nuevo Parlamento.

El oficialismo negaba un acuerdo que la oposición aseguraba se había alcanzado y por eso no bajaba al recinto.Hoy juraron los diputados cuyo mandato comienza formalmente el 10 de diciembre y culmina a fines del 2013. La sesión de hoy, en la que tienen voz y voto, es sólo a efectos de su jura y de la definición de las autoridades de la Cámara y la composición de las comisiones para el próximo período.

El listado de los diputados con mandato hasta 2013 incluye, entre otros, al ex presidente Néstor Kirchner; la titular de la Coalición Cívica, Lilita Carrió; la ex vicejefa del gobierno porteño Gabriela Michetti; el diputado Francisco De Narváez (que renueva su mandato); el ex gobernador bonaerense Felipe Solá; Ricardo Alfonsín, hijo del ex presidente Raúl Alfonsín, y Margarita Stolbizer.

Después de que Pinky diera inicio a la sesión y ordenara el izamiento de la bandera, pidió la palabra el titular del bloque radical, Oscar Aguad, para solicitar que la histórica conductora de TV siguiera presidiendo la sesión -algo que luego se aprobó y que estaba previsto-.

De inmediato, el legislador de Solidaridad e Igualdad (SI) Eduardo Macaluse solicitó un cuarto intermedio para esperar al oficialismo, pero mientras el recinto se convertía en un griterío, los kirchneristas entraron y su moción se tornó “abstracta”.

La sesión, presidida entonces por la macrista Satragno, continuó sin incidentes, aunque en medio de gritos desde la tribuna por los que Pinky pidió en reiteradas oportunidades “silencio”.

Poco antes de las 20, terminaron de jurar todos los diputados. Entonces se pidió que se retiraran los familiares y las barras y se pasó a la parte menos protocolar y más algida de la sesión, la de la elección de las autoridades y la conformación de las comisiones; la del reparto del poder.