Arde el Parque. Con diferentes realidades, esta tarde a las 17 y en el Bautista Gargantini, la Lepra y el Lobo reeditarán el clásico más importante de la provincia. En la penúltima fecha de la primera fase del torneo Argentino A, por la zona B, Independiente Rivadavia, ya clasificado, recibirá a Gimnasia y Esgrima, que quedó fuera de lucha y no pelea por nada. El primer partido que disputaron, en setiembre, terminó igualado 1 a 1 con goles de Leandro Garciarena y Joselito Ortiz.

    Esta tarde, ante un importante operativo de seguridad, los técnicos Roberto Trotta y Marcelo Vázquez buscarán quedarse con el superclásico. La Lepra del Cabezón Trotta, ya clasificada y con el objetivo de sumar la mayor cantidad de puntos para quedar en lo más alto de la tabla general, tiene a los titulares confirmados. Por su parte, el Lobo es un mar de interrogantes. A Vázquez se le presentaron dos dudas de último momento. Ayer, a Eduardo Castro y a José Luis Marzo un cuadro febril y de anginas los puso en duda para el partido de hoy.

    El defensor no concentró y será esperado hasta el último. En caso de no recuperarse, en su lugar entraría Agustín Sanfilippo. Lo del Loco Marzo no es tan grave y jugaría. Si no, la alternativa es Marcos Fernández. Otra duda que presenta el DT, pero táctica, es quién ocupará la banda derecha del mediocampo. Mauricio Arce o Marcos Quispe se disputan un lugar. En la práctica de ayer, el plantel y el cuerpo técnico de Gimnasia recibieron el pedido de un grupo de hinchas para que dejaran todo en la cancha y se queden con el triunfo. En definitiva, en la antesala al gran clásico, las cartas ya están sobre la mesa y sólo falta que la pelota comience a rodar. Que gane el mejor y que haya paz.