PlayStation acaba de revolucionar el mundo gamer con el anuncio de Project Q, su nueva consola portátil que permitirá jugar a los juegos de PlayStation 5 mediante streaming. Se trata de un dispositivo con una pantalla LCD de 8 pulgadas y una resolución máxima de 1080p a 60 fps, que incorpora todos los botones y características del mando DualSense, incluyendo los gatillos adaptativos y la retroalimentación háptica.
Project Q no es una consola independiente, sino que funciona como un complemento de la PlayStation 5, conectándose a ella mediante la función Remote Play o Wi-Fi. De esta forma, se podrá acceder al catálogo completo de PS5 desde cualquier lugar de la casa o incluso fuera de ella, siempre que haya una conexión disponible.
El precio y la fecha de lanzamiento de Project Q aún no se han revelado, pero se espera que llegue al mercado a finales de este año. Algunos rumores apuntan a que podría costar alrededor de 200 dólares, según un popular filtrador de información que adelantó datos del procesador y otras especificaciones del dispositivo.
Con Project Q, PlayStation busca ofrecer una alternativa a la exitosa Nintendo Switch, que domina el mercado de las consolas portátiles desde su lanzamiento en 2017. Sin embargo, a diferencia de la Switch, Project Q no tendrá juegos propios instalados ni podrá ejecutarlos de forma nativa, sino que dependerá totalmente del streaming desde la consola PS5 del usuario.
Además, Project Q tendrá que competir también con otros dispositivos portátiles que están surgiendo en el mercado, como el Steam Deck de Valve o el ROG Ally de Asus, que sí son capaces de correr juegos modernos sin necesidad de streaming.
Project Q es una apuesta arriesgada pero interesante por parte de PlayStation, que busca ampliar las posibilidades de juego de su consola más potente. Habrá que ver si logra convencer a los usuarios y si ofrece una experiencia fluida y satisfactoria al jugar a los títulos más exigentes de PS5 en una pantalla pequeña.