Una pelea entre conocidos pudo haber sido el desencadenante del asesinato de Diego Martín Riquelme (37), cuyo cuerpo fue encontrado la mañana del sábado en un terreno baldío de Buena Nueva, Guaymallén.

La víctima fue atacada con un arma blanca y ultimada de un piedrazo en la cabeza. Al parecer, había estado compartiendo bebidas alcohólicas con un grupo de sujetos, que aún no fueron identificados. Si bien la versión con mayor fuerza es la de la riña, no descartan otras hipótesis con el avance de la instrucción.

En tanto, las averiguaciones en la zona arrojaron que, en la madrugada del sábado, vecinos registraron una pelea entre banditas de los barrios aledaños.

No obstante, no se había podido acreditar una relación entre ambos hechos y esa hipótesis se trabajaba por fuera del expediente, que lidera el fiscal de Homicidios Gustavo Pirrello.

La causa se encuentra sin detenidos y los detectives aguardaban los resultados de peritajes así como también una serie de testimoniales que podrían ser clave.

Hallazgo

Eran cerca de las 10 cuando trabajadores de un obra de construcción divisaron el cadáver de un hombre tirado en un terreno baldío a un costado del callejón Antonelli, a unos 150 metros al oeste del ingreso al barrio Viñas del Sol. El mismo presentaba abundante sangre en el rostro, por lo que imaginaron que se trataba de un asesinato.

Los trabajadores dieron aviso a la línea de emergencias 911 y uniformados fueron desplazados hasta el lugar. Una vez que constataron lo descrito por los testigos, dieron intervención al personal de Homicidios.

Momentos después, los detectives y efectivos de la Policía Científica iniciaron las tareas poscrimen en la escena, bajo las directivas del fiscal Pirrello. En las primeras horas, cuando la prioridad era identificar a la víctima, se apersonaron policías de la División Búsqueda de Personas, ya que por las características del hallazgo creían que podría tratarse de alguien cuyo paradero había sido denunciado.

Aunque, cuando lograron constatar que era Riquelme, oriundo del asentamiento Estación Buena Nueva, quedó descartada esa posibilidad, explicaron fuentes judiciales.

Por su parte, los peritos de Científica confirmaron que el fallecido presentaba una herida punzocortante en un costado del cuerpo, en la zona de las costillas, y que la lesión fatal había sido por un fuerte golpe en la cabeza con un objeto contundente.

Bajo esa línea, se halló cerca del cuerpo una piedra de grandes dimensiones con manchas de sangre, la cual, creen, utilizaron los autores para ejecutar a la víctima. Asimismo, se encontraron algunas cajas de vino en las cercanías, por lo que estiman que Riquelme estuvo bebiendo junto con conocidos en el lugar.

Estos hallazgos y las características del ataque hacen pensar a los pesquisas que la víctima se trenzó en una pelea que tuvo un desenlace letal, posiblemente contra las mismas personas con las que estuvo pasando la noche del viernes y parte de la madrugada del sábado, indicaron las fuentes del caso.

Ahora, Pirrello aguarda tener las testimoniales de los familiares y amigos de Riquelme, para avanzar sobre cómo fueron sus últimas horas con vida y con quién las compartió, información que puede acercarlos a el o los autores del hecho de sangre, explicaron.

Los investigadores también buscarán registrar las cámaras de seguridad públicas apostadas en las cercanías del punto donde hallaron los restos de la víctima. A través de esas imágenes intentarán reconstruir los movimientos que realizó Riquelme en las horas previas a su muerte, así como la posibilidad de identificar a algún sospechoso, sentenciaron las fuentes.