CARACAS (EFE). El reelecto presidente Hugo Chávez ha iniciado, con el cambio de vicepresidente y de ministro del Interior, el ajuste de su equipo de Gobierno, que anunció completará antes del próximo miércoles, cuando comience su nueva gestión hasta el 2013.

   Ese día dijo que anunciará los demás cambios, así como las nuevas funciones de los funcionarios salientes, el ahora ex vicepresidente José Vicente Rangel y el ex ministro del Interior Jesse Chacón. Se trata, manifestó en una llamada telefónica a la cadena estatal de televisión VTV –de la que se valió la noche del miércoles para anunciar estos cambios– de “refrescar el equipo” de Gobierno para “repotenciar y entrar de lleno en esta nueva era (…) rumbo al socialismo”.

  Este no tendrá nada que ver con la dictadura del proletariado, “ni con ningún otro tipo de dictadura”, sostuvo, y reiteró que el modelo socialista que propugna es “plenamente democrático”. Chávez también informó de que decidió ratificar a Rafael Ramírez como ministro de Energía y Petróleo y, simultáneamente, presidente de la estatal Petróleos de Venezuela SA (PDVSA).

    El ex titular del Consejo Nacional Electoral (CNE) Jorge Rodríguez reemplazará a Rangel y el diputado Pedro Carreño a Chacón. Rodríguez, un psiquiatra que dirigió el CNE cuando, en agosto del 2004, se celebró el referendum que confirmó a Chávez en su cargo, es hijo del dirigente histórico de la izquierda venezolana del mismo nombre, asesinado en prisión a inicios de la década de los años 70. Al referirse a Rodríguez, Chávez dijo que se trata de “una excelente persona” y le instó a que ahora, desde la Vicepresidencia, luche contra la corrupción y la burocracia.

  Carreño, a su vez, es un militar, al igual que su antecesor Chacón, y deberá renunciar al escaño parlamentario que ejerce por el Movimiento V República, fundado por Chávez, quien anhela un partido socialista único, con la fusión de otras fuerzas que le apoyan.

    AJUSTES EN EL GABINETE. Una semana después de ganar su reelección del 3 de diciembre, con casi dos tercios de los votos, Chávez pidió a sus colaboradores poner sus cargos a la orden para hacer “ajustes” en aras de “lograr mayor eficacia y eficiencia en el Gobierno y en la administración” pública, según dijo entonces. Esos cambios, alertó en esa oportunidad, “no tienen nada que ver con que alguien haya fracaso o no, que nadie lo tome así”, aunque admitió que “hemos fallado en muchas cosas, pero yo me pongo por delante; soy el primer responsable de las fallas del Gobierno”.

  Entre estas fallas, destacó el llamado de atención que, de manera pública, efectuó contra Rangel y Chacón el 17 de diciembre, en el acto que conmemoró el 176º aniversario de la muerte del caraqueño Simón Bolívar, prócer independentista de varios países de la zona. La entrada en el recinto de los representantes de Panamá bajo la entonación del himno nacional de Bolivia –dos de las naciones de la Gran Colombia forjadas por Bolívar– irritó ese día sobremanera a Chávez, quien sostuvo que errores de ese tipo hacen “que se me caiga la cara de la vergüenza”.

   Los analistas coinciden, sin embargo, en que Rangel integrará el equipo oficialista que se encargará de proponer las reformas para modificar la Constitución y permitir el avance hacia el “socialismo del siglo XXI”, por el cual Chávez dice que votaron sus electores. El gobernante destacó sobre Rangel, de 77 años, que le profesa un respeto “como el de un hijo a un padre, por todo lo que ha ocurrido en estos ocho años” de su gestión, desde que lo nombró canciller, cargo que éste ejerció entre febrero de 1999 y enero del 2001. Rangel asumió la vicepresidencia en mayo del 2002, un mes después del golpe de Estado cívico-militar.