La tasa de desocupación bajó a 8,7 por ciento durante el cuarto trimestre del 2006, contra 10,2 por ciento del tercer trimestre, según la Encuesta Permanente de Hogares (EPH), informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

    La cifra es paradigmática, ya que desde hace casi catorce años (noviembre de 1993) no se registraba un nivel de tasa de un dígito y, a su vez, destacable después de haber marcado un escalofriante 24,1 por ciento a mediados del 2002, en el auge de la crisis de la convertibilidad.

    Sobre una población de referencia de 20.040 pobladores encuestados por el INDEC, en 31 aglomerados urbanos, se individualizaron 11.075 integrantes de la población económicamente activa, con 10.115 ocupados, 960 desocupados y 1.201 subocupados.

    La información del INDEC recuerda que, a partir del tercer trimestre del 2006, se incorporaron a la EPH tres nuevos aglomerados urbanos: San Nicolás-Villa Constitución, Viedma- Carmen de Patagones y Rawson-Trelew. Según el adelanto de los principales indicadores del mercado de trabajo suministrado por el INDEC, la tasa de empleo se ubicó en 42,1, contra 41,6 del trimestre anterior.

    La tasa de subocupación, en tanto, bajó a 10,8 por ciento en el cuarto trimestre del 2006, frente a 11,1 del tercer trimestre. La subocupación demandante se ubicó en 7,5 por ciento (antes, 7,4) y la subocupación no demandante pasó 3,6 en el tercer trimestre a 3,3 por ciento en el cuarto.

    En lo referente al impacto del Plan Jefas y Jefes de Hogar sobre las tasas básicas de los indicadores, se señala que, si se excluyeran del cálculo los beneficiarios de esa ayuda social, la desocupación en el cuarto trimestre del 2006 llegaría a 10,1 por ciento, en tanto que la tasa de actividad sería de 46,1 y la de empleo, de 41.4.

    Según aclara la comunicación del INDEC, en la medición de personas que tienen un plan social sólo se consideran ocupadas si realizan una contraprestación laboral por el mismo y, en caso de recibir un plan sin realizar un trabajo, se consideran desocupados o inactivos, según las definiciones habituales.

    La EPH es un programa nacional de producción sistemática y permanente de indicadores sociales que realiza el INDEC, conjuntamente con las direcciones provinciales de Estadística, y tiene por objetivo central relevar las características sociodemográficas y socioeconómicas de la población. El informe difundido es un adelanto de los resultados correspondientes al cuarto trimestre del 2006. El trabajo definitivo –que incluye el segundo semestre del 2006– con la información desagregada por área geográfica será difundido el 14 de marzo.

    ELOGIAN LA BAJA.
La ministra de Economía, Felisa Miceli, acerca de la creación de más de 700.000 empleos plenos sin planes sociales durante el 2006, destacó que se alcanzó una de las metas más importantes que se ha planteado el Gobierno y se logró que el modelo productivo combine crecimiento sostenido con inclusión social.

    “Por primera vez en catorce años hemos logrado que la tasa de desempleo vuelva a ser de un dígito”, dijo Miceli, al tiempo que subrayó que se logró “una de las metas más importantes que nos hemos planteado en nuestro Gobierno”. Añadió que “la tasa de empleo ha crecido 6 por ciento interanual, lo que implica un valor récord de 42,1 por ciento y una elevada elasticidad empleo-producto”.

    Con entusiasmo, sostuvo que se ha terminado “un paradigma de exclusión que nos afectó durante casi treinta años, el de la crisis permanente y la marginación de la mayoría de los argentinos”. Por último, el presidente del Grupo Macro y titular de la Asociación de Bancos de Argentina (Adeba), Jorge Brito, dijo, después del anuncio, que “las buenas noticias en materia de indicadores laborales reflejan con claridad que el sostenido crecimiento que experimenta la economía nacional es la mejor herramienta en la lucha contra la exclusión social”.