El gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, firmó anoche el decreto que establece el estado de emergencia hídrica, como consecuencia de la prolongada sequía que afecta a gran parte del país.

Tras una reunión de gabinete que duró más de tres horas, el vocero Mauricio Muñoz explicó que “es una medida preventiva, que tendrá correlato en fuertes controles en el uso del agua potable y un trabajo de generación de conciencia en la población”.

La decisión apunta a cuidar las reservas de los diques, que están en baja por la sequía y el consumo elevado de las ciudades más pobladas, como San Luis, La Punta y Juana Koslay.

En la provincia no llueve desde febrero.Ayer, funcionarios municipales adelantaron que esta semana podrían ocurrir cortes de agua preventivos.

El presidente de Aguas San Luis, Daniel Woscoboinick, estimó que empezarían con el agua de riego, aunque no trascendieron aún más detalles acerca de otras medidas.