Pedro Pablo Sosa fue absuelto por el caso del asalto a la empresa de la familia Lombardich, hecho sucedido en agosto del 2003, donde quedó discapacitado Diego Lombardich al recibir un disparo en su cintura. La Justicia absolvió a Sosa por el beneficio de la duda, pero la suerte de este delincuente no fue completa, ya que por otros asaltos fue condenado a 4 años y 6 meses de prisión, en un fallo dado a conocer ayer por la Primera Cámara del Crimen. Por el caso Lombardich, dos delincuentes ya fueron condenados con anterioridad. Osvaldo Guzmán fue sentenciado a 22 años de prisión, en tanto que Raúl Torres mereció a una pena de 20 años. Estos asaltantes fueron juzgados en junio del 2004,momento en que Sosa se hallaba prófugo de la Justicia.