Necesitamos de una vez por todas dejarnos de joder. Necesitamos ver al otro, al de al lado, al que te empuja en el colectivo sin darse cuenta, al que te cruzó el auto por corresponder a la llamada entrante en su celular, al que te pide fuego, al que te limpia los vidrios, al que te lustra los zapatos, a esa mujer perfecta e imposible que te regala algún folleto de lo que sea. No somos ajenos unos a otros. Porque el otro, ineludiblemente, pertenece al nosotros, y ahí entramos todos.

   El país surge desde sus bases, desde el convencimiento propio diario de que nuestra sociedad es un organismo en donde todos estamos involucrados, y hasta que el pueblo no se reconozca como tal, lamentablemente, señores, no seremos más que una masa amorfa. El 28 de junio tenemos la oportunidad de elegir como pueblo, como sociedad. Por lo tanto, nuestro deber y convicción es elegir pensando en el bien común. Garanticemos nosotros el bienestar general. Desde la cotidianeidad, desde nuestro entorno busquemos que la tan manoseada Constitución argentina tenga razón de ser.

    La comunicación social es, a mi entender, esencialmente docencia. Es repensar, es guiar, es entregar en las manos de nuestra sociedad algo que va mucho más allá de la simple noticia publicada. Por ello felicito al señor Marcelo Torrez por encabezar una redacción de periodistas conscientes y responsables, por hacer de diario El Sol un espacio crítico en donde descansa, protegida, nuestra aún temerosa libertad. Felicitaciones y feliz cumpleaños.