El general retirado chileno Sergio Arellano Stark, quien en 1973 comandó la llamada “Caravana de la Muerte”, que asesinó a un centenar de presos políticos en un recorrido por Chile, fue condenado ayer a seis años de prisión efectivos por uno de los episodios de ese sangriento período. El fallo definitivo por el delito de homicidio calificado, informaron fuentes judiciales, fue pronunciado por la II Sala Penal de la Corte Suprema y es la primera que supone la entrada efectiva de Arellano Stark en prisión. La sentencia alcanzó también a otros cuatro represores y se refiere al episodio denominado “San Javier”, la que hace referencia a una localidad situada a 275 kilómetros al sur de Santiago, donde, el 2 de octubre de 1973, los miembros de la comitiva encabezada por Arellano Stark sacaron de la cárcel y asesinaron a cuatro prisioneros políticos. Las víctimas, funcionarios o simpatizantes del gobierno de Salvador Allende, fueron Teófilo Arce Toloza, José Sepúlveda Baeza, Leopoldo González Norambuena y Segundo Sandoval Gómez.