El papa Francisco hizo un llamamiento al Gobierno y a la sociedad de Venezuela para evitar que haya más violencia y pidió “soluciones negociadas” y respeto de los derechos humanos en un país en “grave crisis humanitaria”.

El pontífice instó además a intentar “soluciones negociadas” para esa crisis horas después de que, a su regreso desde Egipto, afirmara que la reanudación del diálogo político entre Gobierno y oposición debe hacerse “en condiciones muy claras”.

Antes del rezo del Regina Coeli en la Plaza de San Pedro delante de unas 70.000 personas el papa se dirigió “al Gobierno y todos los componentes de la sociedad venezolana”.

Francisco pidió específicamente que “se busquen soluciones negociadas a la grave crisis humanitaria, social, política y económica que está golpeando a la población” del país.

“No cesan de llegarnos noticias dramáticas acerca de la situación en Venezuela, con numerosos muertos, heridos y detenidos”, comenzó a decir el papa sobre la situación en el país sudamericano.

“Mientras me uno al dolor de los familiares de las víctimas, para quienes ofrezco oraciones de sufragio, envío un cordial llamamiento al Gobierno y a todos los componentes de la sociedad venezolana para que se eviten nuevas formas de violencia”, dijo.

Algunas de las manifestaciones convocadas en los últimos días por la oposición venezolana se han tornado violentas y han dejado hasta ahora un saldo de 29 muertes, cerca de 500 heridos y más de mil detenidos.