Con la llegada de la primavera vuelven las ganas de retomar las promesas de comienzo de año, hacer dieta e iniciar una actividad física. Aunque los beneficios a la salud son muchos, quienes concurren a los gimnasios con los primeros calores lo hacen porque el espejo no les devuelve la imagen que desean: “flaquita y tonificada”.

Las mujeres, sobre todo entre los 20 y 30 años, “se vuelven locas durante esta época y nos consultan por actividades para adelgazar y endurecer panza y gluteos”, comentó a El Sol, Yamila Cialone de Amazona.

Entre las nuevas formas de ejercitarse, el zumba y el kangoo jumps marcan tendencia. El primero, es un baile que combina ejercicios aeróbicos con ritmos latinos como salsa, bachata y reggaetón y sirve para liberar tensiones, estrés y quemar calorías. El Kangoo se realiza con unas botas especiales que tienen una base elíptica que amortigua los pasos, permitiendo que se reduzca el impacto en las articulaciones al correr, caminar o saltar.

El kangoo jumps es lo nuevo en disciplinas aeróbicas.

Si bien a partir de septiembre comienza la temporada alta en los gimnasios, Gustavo Cuervo, de Gym Le Club, indicó que “desde hace un tiempo hasta acá, se viene tomando conciencia de los beneficios de realizar actividad física durante todo el año”.

Por su parte, la realidad económica también ha golpeado al sector y el movimiento de gente no ha sido tan fuerte como el que se esperaba. “Cuando el dinero no sobra, lo primero que se resigna es el gimnasio. El cuidado de la salud a través del ejercicio debería estar entre las necesidades básicas”, dijo Marcela Enríquez, de Pro-form.

Más allá del cuidado estético, por prescripción médica y para cuidar su salud, los hombres prefieren hacer máquinas y pesas, y las mujeres, spinning, cinta y aeróbicos, lo que trae como consecuencia, mayor definición muscular y liberar estrés.

Los hombres prefieren hacer máquinas y pesas.

“Desde hace años realizo actividad física con un programa que incluye aparatos aeróbicos. Es un estilo de vida. Trabajo en educación y siempre le digo a las maestras que vengan al gimnasio”, recomendó Gladys Matos (65).

Actividades específicas o clubes: los precios

Cada vez son más las mendocinas que eligen hacer ejercicio al aire libre, como alternativa a los gimnasios. Corren o caminan alrededor del Lago del Parque General San Martín, el Parque Central o la Ciclovía de Godoy Cruz.

Ver también: Alternativa al gimnasio: mujeres forman grupos para hacer gym al aire libre

Pero, si se quiere optar por una rutina, a la hora de elegir un gimnasio es necesario tener en cuenta cuáles son las disciplinas que tienen a disposición y que cuenten con supervisión si no se conoce el funcionamiento de las máquinas y el tipo de actividades. Los gimnasios “low cost” (bajo costo)  se recomiendan a personas que  tienen experiencia en ejercicio y entrenamiento.

“He leído mucho sobre kangoo jumps, me pareció divertido y por eso busqué un lugar donde se practique. Son muy pocas las alternativas que hay en Mendoza para ejercitarse con estas botas”, destacó Rocío Rodriguez (21).

Inscribirse en un gimnasio cuesta entre $350 a $500 por mes dependiendo de las actividades que se vayan sumando al plan- aparatos, aeróbicos, sauna, yacuzzi o pileta-. Aunque hay promociones 2 x1 o descuentos si se pagan 12 cuotas por adelantado.

En tanto, sumarse  a un club como Regatas o Gimnasia y Esgrima puede ser más beneficioso si se quiere practicar más de una disciplina como deportes, aparatos, danzas o clases de aeróbicos, localizada y pilates .

Las mujeres buscan tonificar su cuerpo para lucir bellas en el verano.

El primero cuesta $490 por mes con pileta incluida (más $80 la revisación médica) y el segundo $250 por mes, para acceder a la pileta se debe pagar $100 más y $70 los aparatos. La inscripción es de $1.250 y de $3.375, respectivamente (se paga sólo una vez).

Los gimnasio municipales son también una buena opción. Para anotarse en uno de los de Capital hay que abonar $128 por mes y $38 para la inscripción. Sólo hace falta acreditar domicilio en el municipio y llevar un certificado médico.