El fin de semana extra largo derivó en que el Paso Internacional Cristo Redendor volviera a colapsar, con demoras de más de 6 horas.

Si bien el operativo de verano ya se puso en marcha, con más de 16 cabinas habilitadas para la atención al público, la madrugada de este jueves se comenzaron a observar largas filas de vehículos en alta montaña con más de 6 horas de demora.

Gendarmería Nacional debió interrumpir el tránsito en Uspallata para descomprimir los complejos internacionales.

Pese al mal tiempo, neviscas en la zona cordillerana y lloviznas en los diferentes puntos del corredor, el camino para viajar a Chile permanece habilitado para todo tipo de vehículo.

Por lo que desde Gendarmería pidieron a los conductores circular con “mucha precaución” y evitar el exceso de velocidad por la lluvia y posibles desprendimientos de piedras.

En cuanto a los argentinos que aprovecharon para viajar al vecino país durante el miércoles, las autoridades informaron que seis mil personas pasaron por el Complejo Fronterizo Los Libertadores.